En el siguiente artículo, profundizaremos en Diligencia (carruaje), explorando sus orígenes, su impacto en la sociedad y su relevancia en la actualidad. Analizaremos cómo Diligencia (carruaje) ha evolucionado a lo largo del tiempo y cómo ha influido en diferentes aspectos de la vida cotidiana. Además, examinaremos las opiniones de expertos y las percepciones populares sobre Diligencia (carruaje), con el objetivo de proporcionar una visión integral sobre este tema. A través de un análisis detallado, esperamos arrojar luz sobre Diligencia (carruaje) y brindar a los lectores una comprensión más profunda de su importancia en el mundo de hoy.
La diligencia era un carruaje de camino, de cuatro ruedas, que hacía un servicio regular entre dos poblaciones extremas de su ruta con itinerario fijo, trasportando viajeros y correo. Su espacio puede dividirse en tres departamentos:
En algunas diligencias falta el departamento central y entonces a la rotonda se la llama interior. La cubierta, más resistente que la del ómnibus, tiene una barandilla para contener los equipajes y fardos y en la que se fija la baca: inmensa piel formada de cuero cosido y claveteado con anillos en las orillas para sujetarla con cuerdas a la barandilla. Detrás del pescante, sobre el techo del carruaje y delante de la barandilla hay otro departamento, el cupé, formado por un asiento transversal para tres plazas abierto por delante con cubierta de cuero para los pies y las piernas que se une a una capota como la de los cupés.
El contenido de este artículo incorpora material del Diccionario Enciclopédico Hispano-Americano del año 1898, que se encuentra en el dominio público.