Giambattista Giraldi Cinthio

Hoy en día, Giambattista Giraldi Cinthio es un tema que ha cobrado gran relevancia en el ámbito tanto personal como profesional. Desde su surgimiento, Giambattista Giraldi Cinthio ha impactado de manera significativa en la sociedad, generando debates, reflexiones y acciones que buscan comprender y abordar sus implicaciones. Ya sea a nivel local o global, Giambattista Giraldi Cinthio ha capturado la atención de individuos de todas las edades, contextos y profesiones, destacándose como un elemento central en la vida contemporánea. Es por ello que resulta indispensable profundizar en el análisis de Giambattista Giraldi Cinthio, explorando sus múltiples dimensiones y consecuencias para poder comprender mejor su alcance y relevancia en el mundo actual.

Giambattista Giraldi Cintio, Cinthio o Cinzio (Ferrara, 1504 - íd, 1573) fue un escritor y filósofo italiano.

Biografía

Alumno del Estudio de su ciudad natal, enseñó después Medicina, Filosofía y Literatura. Fue secretario del Duque de Ferrara entre 1547 y 1563, pero por una disputa surgida por cuestiones de prioridad literaria entre él y el otro secretario, Giambattista Pigna, se vio obligado a retirarse. Aceptó la oferta del duque de Saboya y pasó al Estudio de Mondovi; estuvo después en Turín, en Pavía en 1571 y finalmente volvió a Ferrara, donde murió.

Obra

Vivió enseñando y escribiendo. En el curso de muchos años compuso una colección de cuentos, los Hecatommiti (traducida al español en 1590 por Luis Gaytán de Vozmediano con el título de Primera parte de las cien novelas, Toledo, Pedro Rodríguez, a costa de Julián Martínez) obra por la cual se le incluye entre los novellieri y en la cual se revela como escritor de imaginación ampulosa y moralizadora. Precisamente por aquellos años en que se discutían y se difundían los cánones de la Poética de Aristóteles y la Contrarreforma católica iba reformando la producción artística, supo conciliar clasicismo y moralismo a imitación de Séneca. De esa conciliación nacieron sus nueve tragedias, la primera de las cuales y la más célebre es Orbecche, representada por primera vez en 1541, en la que la catarsis se alcanzaba mediante el horror y la piedad cristiana de casos extremadamente atroces. Del mismo modo moralizó los héroes de la épica en el poema Ercole (Hércules). Quiso reanudar con Egle el ejemplo clásico del drama satírico, al mismo tiempo que respondía a lo que al cabo era, un erudito. Teorizó sobre materia literaria en sus famosos Discorsi: Acerca del componer poemas novelescos y Acerca de del componer comedias y tragedias.

Su importancia deriva de haber sido el primero de los literatos italianos que trabajó asiduamente para el teatro y de haber acercado al público italiano al género de la tragedia, abandonado desde hacía siglos.