En el mundo actual, Plasma (sangre) se ha convertido en un tema de gran relevancia e interés para personas de todas las edades y ámbitos. Con el avance de la tecnología y la globalización, Plasma (sangre) ha adquirido una importancia sin precedentes en nuestra sociedad moderna. Tanto en el ámbito personal como en el profesional, Plasma (sangre) juega un papel crucial en nuestro día a día, afectando nuestras decisiones, relaciones interpersonales y forma de ver el mundo. Es por eso que resulta fundamental comprender a fondo Plasma (sangre) y sus implicaciones, para así poder navegar con éxito en el mundo contemporáneo. En este artículo, exploraremos diferentes aspectos y perspectivas relacionadas con Plasma (sangre), con el fin de arrojar luz sobre este tema tan relevante en la actualidad.
El plasma es la fracción acelular de la sangre. Se obtiene al dejar a la sangre desprovista de células como los glóbulos rojos y los glóbulos blancos. Está compuesto por un 90 % de agua, un 7 % de proteínas, y el 3 % restante por grasa, glucosa, vitaminas, hormonas, oxígeno y dióxido de carbono, además de productos de desecho del metabolismo como el ácido úrico. A estos se les pueden añadir otros compuestos como las sales y la urea. Es el componente mayoritario de la sangre, representando aproximadamente el 55% del volumen sanguíneo total, mientras que el 45 % restante corresponde a los elementos formes (tal magnitud está relacionada con el hematocrito).
El suero es el remanente del plasma sanguíneo una vez consumidos los factores hemostáticos por la coagulación de la sangre.
El plasma es un fluido coloidal de composición compleja que contiene numerosos componentes. Abarca el 55% del volumen sanguíneo. Está compuesto por un 91,5 % de agua, además de numerosas sustancias inorgánicas y orgánicas (solutos del plasma), distribuidas de la siguiente forma:
Funciones de conjunto de las proteínas plasmáticas:
Las proteínas plasmáticas se clasifican en:
Los componentes del plasma se forman en varias partes del organismo: